M+18: Un juguete
Status:
Comprar madera: Check.
Ir a comprar madera en bici: Check
Cambiar de opinión en la tienda: Check
Comprar decapante de madera: CHECK! (este es para un proyecto secreto).
Aprender nuevos trucos para cortar y lijar: Check
NOTA MENTAL 1: Necesito si o si un taller.
NOTA MENTAL 2: Me gustan las herramientas.
La semana pasada centré mis esfuerzos en crear el primer juguete de mi futuro sobrino. Estoy absolutamente feliz de convertirme en tía… feliz porque mi hermana está espléndida y contenta, porque mi cuñado es un futuro papá feliz e ilusionado, porque mis padres se convertiran en abuelos (MUY FUERTE!), y Cris está preparándose para robarle al sobri los mini-calcetines… si, Cris tiene un problema con los calcetines de bebé.
En fin… lo cierto es que con M52, estoy descubriendo que siento inquietud por construir cosas… revisaba mi lista, y viéndola con detalle, caigo en cuenta que hay un montón de actividades relacionadas con crear o construir objetos… renglón seguido de cerca por actividades de cocina/gastronomía y los deportes. Supongo que estoy redibujándome… agregando detalle al retrato mental que tengo de mi misma. De momento me siento feliz y satisfecha con las nuevas curvas y artistas, y con la matización de mis luces y sombras.
Pero vayamos al grano (más bien al serrín) el objetivo era construir un juguete… algo que sirviera para divertirse, hecho a mano y único. Consideré varias opciones… caballitos de madera sobre todo… pero, al final decidí escoger un clásico… decidí hacer un alfabeto de tacos de madera.
Así que aprovechando la soleada tarde del sábado, papá y yo nos fuimos en la bici a comprar mis listones de madera.
Mi primer plan era comprar un listo bruto, cortar los cubos y lijar como si la vida me fuera en ello. Pero en la tienda descubrí unos listones cortos, de madera cepillada y con las aristas rebajadas. Eran la base perfecta! así que me permití a mi misma algo que me cuesta mucho… me permití modificar el plan sobre la marcha… quizás les parezca una tontería, pero me cuesta MUCHO permitirme este tipo de licencias… la experiencia en mi trabajo me dice que los planes han de meditarse bien para que tengan que modificarse lo menos posible. Pero es que estos nuevos listones eran mejores! saltaba a la vista, y el tacto era infinitamente más agradable que el de la madera que pensaba comprar en un principio.
Así que con mis listones y mi flamante decapante, me fui directo a caja y pagué.
La vuelta en bici fue muy agradecida, soplaba menos el viento y el sol estaba algo mas bajo… La placidez del paseo me ayudó a decidir que quería tomarme el resto del sábado con calma y descansar un poco. El cambio de temporada me tiene exhausta…
Llegó el domingo y con él la cortadora, la lija y mi explosión personal en la sala de casa… ordené todo en la mesa y empezamos a medir y cortar… Para no tener que medir cada vez la distancia de cada cubo, corté un cartoncito para trasladar la medida automáticamente y corregí el margen de error con una escuadra. Piece of cake!
Así que manos a la obra empezamos a cortar y, mas pronto que tarde, me di cuenta de que no calculé los milímetros que se comería la sierra… anyhow, it was too late!.. ya había empezado y decidí seguir para no perder los cubos que ya estaban cortados.
Cortar, cortar sin parar de cortar :D! hasta que llegó la hora de la siesta ¬¬… si, era domingo… día de la madre… y tuve que abandonar la cortadora para pasarme, a la mucho más delicada, actividad de lijar a mano para avanzar un poco, mientras pasaba el tiempo para luego seguir haciendo ruido sin molestar (demasiado) a los vecinos.
Para mi absoluta consternación esta vez no pude usar la lijadora eléctrica… las lijas que tenía disponibles no acompañaban mucho (se desgastaban muy rápido o eran demasiado gruesas), y por otro lado el acabado que conseguí con la lima de uñas era mucho mejor. Así que lijé todo a mano al final.
Uno de los puntos complicados, fue decidir cómo pintar las letras en los cubos… piensen por un momento… si pintamos un cubo entero de letras «a», no tendré suficientes letras «a» disponibles para escribir palabras. Así que montamos un sistema. Cada cara de cara de los cubos sería de un color, y cada vez empezaríamos el alfabeto en una letra desplazada. Es decir que la cara uno empezó en «a» y siguió en orden, la cara dos empezó en «b», la cara tres en «c» y así hasta cubrir las seis caras… de esta manera los cubos estaban bastante mezclados y me garantizaba vocales en seis cubos distintos y separadas entre si.
Las letras las pintamos entre papá y yo… Y el acabado me encanta! es vintage-naive-adorable… todas son diferentes, cada una tiene sus particularidades, ninguna es perfecta, ninguna es igual!.. espero que al sobri le gusten y espero jugar con él a hacer primero montañas de cubos y luego palabras.
Lo que mas me emociona de este proyecto es pensar que hemos creado algo a mano, donde hemos depositado mucha ilusión y que en poco tiempo será un objeto de diversión para el primer bebé de la familia… En el fondo soy una sentimental.
PD: Creo que agregaré un ribete blanco a las letras… llevo toda la semana pensando en ello!
Más fotos aquí!
Y esta semana: Aprender a hacer jabón + ver The Fight Club